25/1/08

IQUITOS UNA DE LAS PRIMERAS CIUDADES QUE HIZO CINE EN EL PERÚ

Antonio Wong Rengifo junto a indio yagua, durante el rodaje
de una de sus obras cinematográficas en Loreto a principios del siglo pasado.


Una actriz loretana de principios del siglo pasado que no pasó de participar en una película de solamente trascendencia local, fue reconocida como tal en la historia, mientras que un bien intencionado hombre de la sociedad iquiteña que no logró que su entusiasmo rebasara sus propios límites emocionales y ni con su anglosajónico nombre artístico, es también mencionado en el reporte del cine iquiteño.

Papel singular jugó en el cine peruano Antonio Wong Rengifo, aunque de él se menciona poco o casi nada en la historia del séptimo arte nacional. Hizo algunas obras que se encuentran –probablemente- en poder de sus descendientes que marcaron época y señalaron el camino de esta industria en nuestro país.

Aunque recientemente, nuestros conciudadanos han mostrado valiosos arrebatos que los han llevado a presentar una que otra obra que engrosa las producciones del cine, como es el caso de Dorian Fernández, que condujo el título “El Chullachaqui”; nombre del mítico personaje de nuestra Amazonía al que puso en la boca del comentario nacional durante el 2007 a través de presentaciones realizadas en algunas salas dedicadas al arte en Lima.

La historia reporta en Iquitos muchas anécdotas y pasajes que rescatar. Ya lo hicimos en este blog, hace algunos meses, en el que transcribimos un artículo del sacerdote y periodista, Silvino Treceño Ríos que da cuenta de las exhibiciones cinematográficas del Cine Alhambra.

Ahora ofrecemos una nueva entrega de la publicación de la revista Progreso, redactada por Percy Vílchez Vela.

El listín cinematográfico
[1]


En el vasto y fabuloso historial cinematográfico de Iquitos figurará un actor de armas tomar y de una inquebrantable fe en su destino elegido. El mismo será nombrado como Carlos la Torre Morey, loretano de origen, aspirante perpetuo a actor de cine y constantemente rechazado por los directores y filmadores de películas. En sus urgentes afanes por convertirse en galán de tal o cual cinta legendaria, adoptará en determinado momento el pomposo y extranjerizante nombre de Stuart Kent. Pero nada de nada.

Entonces improvisará su propio espectáculo y se irá dando funciones para ganar unos centavos, mientras le llegaba la diosa fortuna para convertirle en actor del bendito séptimo arte. Ese personaje inolvidable no tendrá la suerte de Deidamia Pinedo Díaz, loretana de nacimiento, mujer de las tablas teatrales y actriz de cine, aunque nunca estrella mundial de celebrada fama. Ella participará en incontables obras de caridad y será la heroína principal de la película “Bajo el sol de Loreto”, de Antonio Wong Rengifo. Ella tendrá el nombre de Diana y actuará como la esposa de un tal Julián, una especie de pionero de los bosques amazónicos.

Hemos querido citar ambos extremos para referirnos a la programación cinematográfica de las tres salas que hay en la ciudad, una de las cuales pertenece al cine El Loretano. El iquiteño por lo general es un cinéfilo empedernido, un cinemero obsesivo. La seducción de los avatares de la función, de las cruzadas y de las gestas de héroes, de los admirables trajines de la heroína, forman parte sustancial de su vida, porque amplifica su capacidad fabuladora, espolea su imaginación desbocada y acelera su mitomanía latente.

En estos momentos en el Alambra presenta una de las tantas cintas de su vasto repertorio: La Bestia Magnífica, Con Jhon Russelt y Joanett Nylon. El cine España tiene en su listín una temporada de 3 películas: Indiana, El esqueleto acusador y La ventana que brilla.


[1] VILCHEZ, Percy. Un momento de Iquitos (basado en el 9 de noviembre de 1926). Publicado en Revista Proceso Año XXXII, Nº 81. Enero – Febrero 1998. p.p. 16.